Queridos y estimados lectores: creo que ha habido un grave malentendido. En el pasado he venido contándoles de mi tercera, última, más agobiada y menos longeva novia, Paulina. En las…
Queridos y estimados lectores: creo que ha habido un grave malentendido. En el pasado he venido contándoles de mi tercera, última, más agobiada y menos longeva novia, Paulina. En las últimas semanas se me ha hecho notar que, si bien le hemos estado tirando flores como si fuera la tumba de Michael Jackson, también he dado a entender que nunca tuvo una oportunidad real de trascender en mi vida amorosa, real, ficticia, ni virtual; y, por tanto, no fue (es) alguien relevante para mí. Y para desmentir dicha interpretación, me voy a tener que remontar a tiempos inmemoriales: allá por el año de 2003, cuando tuve mi primera noviecita de secundaria. Agárrense y concéntrense, que nos vamos a ir por partes. Muchas.